en la plaza

Era de noche y estaba sentado en un banco de la plaza, a las tres de la madrugada no ves a nadie por la calle por lo tanto puedes estar a tus anchas sin ningun problema.
Sentí una pequeña gota de lluvia caer por mi cara
- Genial - dije entre gruñidos - ahora se pone a llover.

Jane y yo estabamos de vuelta a la mansión cuando vimos a Alec , ¿Pero que hacia ahí, estaba lloviendo?, Menos mal que Jane y yo cogimos un paragüas negro como no , para no llamar mucho la atención, la verdad es que no pegaba para nada llevar uno rosa chillón . Jane y yo nos miramos sorprendidas por la coincidencia.
-¿ Pero qué haces aquí Alec?- Dijimos al unisono.

Di un suspiro vaya preguntitas que me hacían ¿qué podía hacer en la plaza de San Marcos a estas horas cuando no había gente?
- Ducharme ¿no lo veis? - dije irónico - ¿vosotras que creeis? he salido a dar un paseo y para mi desgracia se ha puesto a llover.
Miré hacia uno de los callejones que llevaban hacia las afueras
- Lo siento chicas, no tengo un buen día.

-tranquilo, creo que ya nos hemos dado cuanta-puse los ojos en blanco-¿que te pasa? no creo que estes asi por el simple echo de mojarte un poco

Fuí hacia la plaza, había oido la voz de Alec y no parecía muy contento, aparecí detras de Corin y Jane y miré a Alec
- ¿Tal vez nuestro pequeñín esta así porque tiene hambre?

Renata aparecio y se acercó a nosotros

-Hola Renata-la salude con la mano-¿que haces por aqui?

- Mas bien que haceis vosotros por aquí - dije alzando una ceja - yo soy la que tiene la guardia hoy, creo que es de lo mas normal qeu me veais por estos lugares

-no em habia dado cuenta-dije-Corin y yo hemos salido a dar un paseo y nos hemos encontrado a Alec en uno de sus dias malos,

- De lo del día malo me he dado cuenta - dije mirándolo - que humor de perros que tiene hoy ¿qué te han hecho?

-si hace tiempo que no te veia asi-dije extrañada

-Bueno ya tendrá sus motivos-Dije despreocupada-Pero para que te pongas así necesitas un buen motivo .

Las miré enfadado
- Jane tu tienes muchos días malos, al menos dos por semana, puede que se me esté pegando algo de ti.
Miré hacia el reloj y volvi a mirarlas de nuevo, las pobres estaban patidifusas, no solían verme así.
- He discutido con Aro, ¿recordais al neófito de Francia? dijo que tenía un poder, el maestro está molesto porque le quemé en vez de traerlo, dice que no debería haberlo hecho porque podría servirnos para la guardia y que él se hubiese encargado de castigarlo a través de ti - dije mirando a Jane - ¿ahora se supone que debo dejar que me insulten? si alguien debería castigarlo sería yo no tú.

- Vaya Alec lo siento - dije con el gesto torcido - Aro jamás te había cuestionado en esos asuntos, no entiendo porqué puede haberlo hecho.

- Yo si -contesté - parece que aquí solo alguien tiene derecho a castigar a la gente si le insultan

-a mi me parece bien lo que has hecho, yo haria lo mismo-le sonrei-y creo que Aro no deberia haverte dicho nada, ya nos conoce y sabe como reaccinamos ante cosas asi, ademas el don del neofito, si acaso tubiera alguno-puse los ojos en blanco-no seria tan bueno cuando no lo uso para defenderse

- Asqueroso neófito - dí una patada al banco de piedra que tenía al lado y abrí una pequeña brecha - ¿pero quien se creia que era?, yo no iba a dejar que me insultara y jamás, jamás me arrepentiré de lo que hice por mucho que Aro me regañe.

- A mi me parece que Alec en realidad no está enfadado con Aro- dije etre dientes - ¿no será que a alguien le ha picado el gusanillo de la envidia?

- ¿Envidia? - me reí - por favor Renata en lo que Jane tumba a uno yo he tumbado a cincuenta, ¿crees que yo puedo tener envidia de ella? no te ofendas Jane pero la verdad soy mejor en ese aspecto.

-no me ofendo-dije mirandolo con los ojos entrecverrados-no tiene porque tener envidia-me volvi a Renata-cada uno tiene una cosa diferente pero a los dos nos gustan nuestros dones

- Pero es obvio que le molesta que tu puedas torturar sin moverte a tus victimas y el tenga que moverse para hacerlo, yo diría que es mas cómodo ser tu

-ya-asentí-pero yo solo puedo atacar a uno y él a todos los que quiera

- A mi no me molesta para nada eso - dije molesto - y si yo puedo atacar a mucha gente a diferencia de Jane asi que no tengo nada de que quejarme

- De acuerdo Alec, señor todopoderoso, no es necesario que te ofendas de ese modo, solo era una broma, se ve que no estás para ellas

- No lo estoy - dije mirando a Renata - ahora mismo las bromas no me vienen bien, pero gracias por intentar animarme

-si que te ha sentado mal lo que te ha dicho Aro, no te lo tomes tan enserio ya conoces sus cambios de humor repentinos y seguro que le has pillado en mal momento